El Metaverso y la publicidad: Metabrands y sus nuevas formas de comunicar.

Hace ya un tiempo que Marck Zuckerberg anunció que Facebook pasaría a llamarse Meta y que su prioridad ya no sería la red social, sino el metaverso. La idea de un mundo digital no es algo que haya nacido en ese momento, pero esta fecha quedará marcada en el calendario tecnológico: ese fue, en realidad, el impulso definitivo a una idea que tanto él como otras compañías tecnológicas ya llevaban gestando desde hacía tiempo; es una apuesta por un desarrollo que promete mucho aunque, en un momento, su futuro parecía incierto.

 

«La gran oportunidad es ahora», aseguraron grandes figuras de la publicidad, como Hugo Albornoz. Cuando Zuckerberg hizo su anuncio, ellos ya llevaban meses reflexionando sobre la forma de «abrir camino» en este nuevo universo. Ahora, acaban de lanzar una nueva unidad de negocio llamada ‘Metabrands’, la primera para la puesta en marcha en España de proyectos de realidad extendida en el sector de la publicidad, el marketing y la comunicación.

 

«Durante un tiempo, cada dos años teníamos que mutar nuestros servicios, porque salían nuevas plataformas o dispositivos, pero desde hace seis años no nos parecía que hubiera una gran revolución tecnológica», explica. Esa gran revolución, dice, ha llegado ahora con el metaverso y su objetivo es posicionarse en ese nuevo mundo, al que ya se han sumado otras multinacionales como Nike o Gucci. «Cuando una innovación revoluciona el mercado, su aceleración es tan brutal que quien no está dentro desde el principio puede quedarse totalmente fuera», afirma.

«Nuestra gran apuesta es la realidad mixta, cómo la capa digital va a confluir con el mundo real», explica Albornoz. La teoría es que cualquier tienda con e-commerce va a poder funcionar también en este mundo en 3D con una experiencia mucho más lúdica y personalizada. A su vez, las marcas van a poder vender sus productos de una manera menos intrusiva y más natural.

 

 

Una carrera de ida

Cada marca comenzó por el canal de comunicación que era relevante en su momento y se apropió del mismo, creando el contenido que consideraban más relevante dependiendo de la plataforma. Actualmente, con el Metaverso, las formas de crear contenido son ilimitadas y cada marca puede crear la suya propia, sin restricciones y con experiencias totalmente personalizables y únicas. Literalmente, el límite es el cielo. 

 

La situación actual es extremadamente similar a cuando las compañías empezaron a crear sus perfiles de redes sociales o sus sitios web: al principio presentó un reto y complejizó el sistema de ventas, pero luego fue una ventaja, por eso lo llamamos “una carrera de ida”, porque posiblemente, aquellos que no comiencen a construir su transición ahora, luego no podrán alcanzar el ritmo. 

 

Por el momento, el metaverso está limitado a los dispositivos a través de los que se podría acceder a él dado que aún estamos en el comienzo del largo camino que nos espera con respecto a él. Los profesionales tienen sus esperanzas puestas en el lanzamiento de las gafas de realidad virtual en las que trabaja Apple.

 

Para ser pioneros en el Metaverso, Metabrand ha puesto en marcha cuatro áreas de transformación. Por un lado, pretenden hacer crecer el negocio de sus clientes a través de una línea de trabajo centrada en la innovación de espacios y ciudades, como CEEK City. Por otro lado, a través de la creación de entretenimiento en realidad mixta. El tercer área es la creación de contenido con influencers en este nuevo contexto. Y, por último, otra línea que pondrá el foco en la navegación y el consumo.

 

Increíblemente, estos son los primeros “baby steps” de esta tecnología, y nos esperan años de desarrollo acompañadas de aciertos y errores.